Día 128: Vcitoria sobre los arameos y los amonitas

INTRODUCCIÓN

• Ayer vimos a Mefibóset que era un hijo pequeño y que tenía siervos que vivían con él en la casa de Siba, y que este hombre Mefibóset, ahora come a la mesa del rey, es un hombre que está tullido de pies, es un hombre que se ha ganado el favor del Rey, simplemente porque es el hijo de su mejor amigo, de Jonatán.

• Esto me encanta porque vemos como David es un hombre bueno, es un hombre que abre su corazón a Mefiboset, lo sienta a su mesa, lo hace sentir bienvenido.

• Este acto tan hermoso que nos muestra un gran corazón, tal vez se vea empañado por el capítulo que vamos a ver el día de hoy. Se da la guerra contra los amonitas, hay una primera campaña del Rey.

• También está el pecado de David y está el nacimiento de Salomón.

• Estaremos leyendo Segunda de Samuel, capítulo 10; 1 Crónicas, capítulo 13; y Salmo 31.

PUNTOS CLAVE

• Y qué mejor que empezar con estas últimas líneas que, nos daba el Salmo el día de hoy: «Tengan valor y firme el corazón ustedes los que esperan en Yahvé.»¿No estamos tú y yo esperando en el Señor? ¿No es por eso qué estamos leyendo esta historia de la salvación y estamos buscando cómo nuestra vida se encaja en esta historia?

• Podemos hablar de dos cosas: de las dificultades de David y de los triunfos de David. Y todos los triunfos son cuando su corazón está puesto en el Señor. Y las dificultades, no son otra cosa que momentos en los cuales él tiene que detenerse, pensar y decir: «¿Qué voy a hacer?» Y ¿cuál es la solución que él encuentra? Rendirse a Yahvé y decirle Señor: «Yo no puedo hacer nada, todo está en tus manos. Tú guíame, tú muéstrame el camino y déjame saber lo que tengo que hacer.»

• Dios está contigo, Dios está conmigo, pero nos ha dado el libre albedrío. Y a veces no nos damos cuenta que el pecado, es algo que viene y nos pone en contra del mismo Dios. Esto nos sugiere qué, debemos cada día estar más cerca del Señor y decirle: «Señor, que tu palabra sea la que guíe nuestros pasos, que tu palabra sea la que dirija nuestras acciones. Porque queremos estar siempre bajo tu luz, bajo tu dirección.»

• Pidámosle hoy al Señor, que más que nunca, en este clima de violencia que hay en el mundo; en este mundo con tanto sincretismo, con tanto pansexualismo, con tantas cosas que tratan de alejarnos del Señor, que sea Él nuestro faro, que sea Él nuestro guía, que sea quien nutre cada uno de los momentos de nuestra vida.

• Que el Salmo que hemos proclamado el día de hoy, sea parte de nuestra oración y le digamos: «En ti Yahvé me cobijo, nunca quede yo defraudado. Líbrame conforme a tu justicia, tiende a mí tu oído, date prisa.» el Señor siempre es nuestra roca, es ese refugio donde podemos encontrar esa guía, donde podemos encontrar el sentido de nuestras vidas y donde incluso podemos sentir un poco de amor, a nuestro propio dolor y decir: «Bueno, este dolor por el cual estoy pasando, no es en vano, si lo pongo en manos de Dios, pueden crecer y encontrar allí una bendición y tal vez ayudar a que otros crezcan.»

• Tal vez es lo que tú y yo tenemos que hacer hoy, pedir que el Señor venga en nuestro auxilio porque Él siempre viene a darnos la mano, a sus elegidos, a sus amigos. Él viene a protegernos y viene a devolvernos con creces todo lo que le ofrecemos a Él. Así que, digámosle al Señor que, queremos descubrir lo grande que es su bondad, que nos queremos acoger a Él porque no queremos quedar nunca defraudados.

ORACIÓN FINAL DE FRAY SERGIO

De esta manera terminamos hoy haciendo una oración mutua. Yo orando por ustedes y ustedes orando por mí. Para que tanto ustedes, como yo podamos ser fieles a esta Palabra que se nos ha confiado, para que la podamos vivir con fe, para que tú y yo siempre podamos dar testimonio de la verdad y cumplir cada una de estas bellas enseñanzas que se nos da a través de la Palabra del Señor. Y que la bendición de Dios todopoderoso que es Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre cada uno de ustedes y los acompañe siempre. ¡Que Dios los bendiga!

COMENTARIOS ADICIONALES

2 S 10:1-19 – Victoria sobre los amonitas

"Las batallas contra amonitas y arameos sirven para contrastar el trato leal de David frente a la respuesta descortés y cruel del joven rey amonita (vv. 1-5), así como el valor de David y la habilidad de sus tropas frente a la torpeza de los arameos que sucumben y caen en el combate (vv. 15-19). Sin embargo, la contienda con los amonitas no termina sino que será el marco del episodio de Urías y de Betsabé narrado en los capítulos siguientes. De esta forma el autor sagrado pone de manifiesto cómo el rey generoso, sabio y valiente llegará a hacerse egoísta, necio y cobarde cuando se deja llevar por la pasión.

Joab, que al paso de los años tendrá un protagonismo importante como hombre ambicioso y sin escrúpulos en medio de las intrigas de palacio, aparece aquí como extraordinario estratega militar (vv. 6-14), capaz de salir victorioso en las contiendas bélicas regresando inmediatamente a la corte de Jerusalén. Es un ejemplo de hombre leal que terminará corrompiéndose por la ambición de poder y la codicia.”

(Comentario tomado de la Sagrada Biblia de la Universidad de Navarra, edición Latinoamericana, versión EPUB)

Salmo 31

Súplica con elementos de acción de gracias. En el salmo se funden ambos elementos, de modo que no es fácil determinar si la acción de gracias se refiere a otra liberación precedente, que funda la confianza actual, o si es una convicción de haber sido escuchado, que permite ver el futuro como pasado ya sucedido en la decisión divina. Esta duplicidad deja el salmo disponible para diversas situaciones. Las últimas palabras de Cristo en su vida mortal (Lc 23,46) son una cita del verso 6. Pronunciadas por Cristo, las palabras del salmo alcanzan su plenitud de sentido: el abandono, el sufrimiento, la confianza, la liberación. Desde esta experiencia, Cristo invita también a los suyos al amor y a la esperanza, abriendo acceso al «asilo» de Dios, revelando «el prodigio de su misericordia». [Luis Alonso Schökel]

(Comentario tomado del website https://www.eltestigofiel.org/index.php?idu=sl_17144. Accesado el día 30 de mayo de 2022)